martes, 28 de diciembre de 2010

Pintar con manitas, para que tus peques se diviertan creando

 Pintar con manitas, para que tus peques se diviertan creando

¿Quieres divertir a tu peque y no sabes cómo hacerlo? Es cierto que muchas veces los juguetes ya no divierten a tu niño, quiere hacer nuevas cosas, divertirse de nuevas maneras, y no sabes cómo mantenerlo entretenido. No te dejes vencer por los dibujos animados de la televisión, ni por las golosinas. Hay alternativas más sencillas y más beneficiosas para tu criatura.

Una de esas alternativas es utilizar pinturas de diversos colores, papel y las manitos de tu pequeño. Tan simple y tan divertido. De esta manera él se sentirá todo un artista, que con sus manos puede crear diversas formas y dibujos. Se lo hará partícipe de una diversión nueva que además de desarrollar su creatividad lo mantendrá entretenido por largos ratos.

Descubre de qué se trata esto de “pintar con manitas” como lo llamo yo.

Lo primero que debes conseguir es pintura especial para manos. Tienen que cumplir con las condiciones necesarias para no dañar la piel de tu niño. Además por lo general vienen de los más diversos colores. Aquí te dejo un sitio web donde puedes comprarlas a tan solo €6,21.

Una vez que cuentas con las pinturas, lo que tendrás que conseguir es un pincel o rodillo. Con él lo que harás es primero llenarlo del color de pintura que desees y luego pintar toda la manito de tu peque con la pintura. Una vez esté toda pintada, deberá inmediatamente colocarla sobre el papel. Lo repites una y otra vez, con diversos colores y así va creando su propio dibujo con sus propias manitas.

Una opción muy divertida es la que ven en las fotografías, crear un pulpo. Otra opción es crear un árbol de manzanas. Aquí les dejo las imágenes, para que les inspire y se animen a hacerlo con sus pequeños.

 Pintar con manitas, para que tus peques se diviertan creando

 Pintar con manitas, para que tus peques se diviertan creando

 Pintar con manitas, para que tus peques se diviertan creando

 Pintar con manitas, para que tus peques se diviertan creando

 Pintar con manitas, para que tus peques se diviertan creando

 Pintar con manitas, para que tus peques se diviertan creando

 Pintar con manitas, para que tus peques se diviertan creando

 Pintar con manitas, para que tus peques se diviertan creando

Fuente: http://www.entrepadres.com/2009-09-28/3408/pintar-con-manitas-para-que-tus-peques-se-diviertan-creando/

martes, 7 de diciembre de 2010

Cómo preparar el biberón

biberón bebé

El primer paso que debes realizar antes de preparar el biberón de tu pequeñoes asegurarte de que cumples con una buena higiene personal. Asegúrate de que tienes las manos y las uñas limpias y que la ropa que llevas puesta no es la misma con la que realizas tareas domésticas.


Cómo preparar la leche

Si vas a preparar elbiberón con leche líquida, puedes verterla directamente y calentarla. En cambio, si vas a utilizar leche en polvo, debes tener en cuenta:

• Para diluir la leche en polvo, utiliza agua mineral sin gas y que no sea del grifo. El agua debe contener una cantidad pequeña de sales minerales porque si lleva una cantidad excesiva de sales puede alterar las propiedades de la leche.

• Retira el biberón del esterilizador con la ayuda de unas pinzas y llénalo con el agua esterilizada.

• Añade la leche en polvo respetando las cantidades indicadas por el pediatra.

• Disuelve la leche removiendo con una cucharita de tallo largo, de forma que el polvo se disuelva evitando la formación de grumitos.

Cómo calentar la leche

1. Calienta el biberón al baño María, en el calientabibierones eléctrico o en el microondas. En caso de calentarlo en el microondas, debes tener presente que se obtiene una temperatura más elevada en la parte superior del biberón. Debes colocar la botella recta y sin tapón, para permitir la salida del calor. Una vez sacado del microondas, el biberón debe cerrarse, volcarse y mezclar moviéndolo unas diez veces, de manera que la temperatura de la leche sea homogénea en todos los puntos.

2. Antes de ofrecer el biberón al niño, comprueba la temperatura vertiendo unas gotas de leche en el dorso de la mano: no debe superar los 37-38ºC. Si está demasiado caliente, puedes enfriarlo con agua. Si está demasiado frío, puedes calentarlo.

Cómo conservar la leche

La leche líquida: una vez abierta, la botella debe conservarse en el frigorífico y consumirse antes de 24 horas.

La leche en polvo: la caja de leche en polvo debe consumirse antes de quince días a partir de su apertura. El envase debe conservarse cerrado en un lugar fresco y seco.

Los biberones preparados: en algunos casos, los biberones pueden prepararse con antelación y conservarse en el frigorífico. Durante los viajes, te aconsejamos preparar la leche en el momento de dársela al niño.

Fuente: http://www.mibebeyyo.com/bebes/alimentacion-bebe/como-preparar-el-biberon-4744

Estimula a tu bebé en el agua

La natación para bebés o matronatación es una actividad que favorece la estimulación de los bebés. Es muy beneficiosa para desarrollar la motricidad del niño y debe iniciarse a partir de los seis meses de edad, cuando el sistema inmunológico del bebé se encuentra más desarrollado.

Lo ideal en una clase de matronatación es que sean los papás quienes se bañen con el pequeño. De esta manera, la actividad ayuda a fortalecer la relación con los padres.

Es muy importante que en la piscina en la que se desarrolle la actividad haya juguetes de colores vistosos, que llamen la atención al bebé. A continuación os ofrecemos un vídeo en el que podréis ver algunos de los ejercicios a realizar. ¿Queréis observar cómo Iñaki Méndez, profesor de Baby Gim y la pequeña Maya, se dan un particular chapuzón?



Fuente: http://www.mibebeyyo.com/bebes/estimulacion/estimulacion-bebe-agua-4832

Cómo tratar pequeños problemas de salud

Aquí tenéis unas prácticas pautas sobre cómo tratar algunos pequeños problemas de salud de tu bebé. Ello no reemplaza nunca el consejo del pediatra, pero puede serte útil.

Cólicos. Si tu bebé llora durante mucho tiempo, pareciendo inconsolable, es que tiene un cólico. Si el pediatra te dice que está bien, no debes preocuparte. Mecerlo con dulzura, le tranquilizará.

Congestión nasal. Si el bebé tiene un tapón nasal que dificulta su alimentación y su sueño, puedes usar suero fisiológico. Sin embargo, te aconsejamos que evites el uso de gotas vasoconstrictoras.

Dermatitis del pañal. Durante la dentición de los bebés, no es raro que tengan el culito rojo. Puede tratarse de dermatitis del pañal y es conveniente visitar el pediatra. La higiene es una medida fundamental para prevenirla: lavarle el culito después de cada evacuación, cambiar a menudo el pañal y ponerle una crema protectora.

Diarrea. Algunos bebés pueden presentar problemas de digestión menores. La toma de leche materna puede provocar un tono amarillo y algo líquido en las heces del pequeño. Aunque sea común, la diarrea puede ser peligrosa porque le produce deshidratación. Te aconsejamos que consultes con tu pediatra.

Estreñimiento. Si, por el contrario, las caquitas del bebé son consistentes y llora cuando evacua, tiene estreñimiento. Puede ser consecuencia de darle el biberón en lugar del pecho. Consulta con el pediatra.

Fiebre. La fiebre no es normal y debes vigilarla. Si el pequeño está acatarrado, debes tomarle la fiebre un par de veces al día y darle de beber de forma regular. Tener un poco de temperatura no es peligroso, pero puede serlo si se trata de una subida repentina. No dudes en consultar a tu pediatra.

Gastroenteritis. Para evitar que tu bebé enferme de gastroenteritis, la mejor prevención es lavarle las manos a menudo. Asegúrate de pedir a todas las personas que estén en contacto con el pequeño que también se laven las manos.

Infección de oído. Cuando los bebés tienen un resfriado, a menudo también padecen una infección de oído. Los síntomas son claros: malhumor, sacudidas de cabeza cuando llora o tocarse la oreja constantemente. Consulta a tu pediatra.

Regurgitaciones. Las regurgitaciones se producen cuando la leche del estómago vuelve a subir hacia la boca. El problema suele resolverse entre los seis y los doce meses, cuando los pequeños empiezan a sentarse. Para evitar que suceda, no le des zumos de frutas ni le obligues a terminarse el biberón. Si dejas más espacio entre las tomas y utilizas una leche más espesa, le ayudarás a no tener regurgitaciones. También es eficaz ayudarlo a expulsar los gases antes de acostarlo.

Fuente: http://www.mibebeyyo.com/bebes/salud-bebe/como-tratar-pequenos-problemas-de-salud-4868

Recetas para bebés y niños


Alaaaa, cuántas recetas para bebés y niños podéis encontrar aquí!!!

martes, 23 de noviembre de 2010

Alimentación complementaria: las frutas y las verduras

Destete: frutas y verduras para el bebé

La OMS recomienda la lactancia materna exclusiva hasta los seis meses del bebé. Durante el primer año, la leche continúa siendo el principal alimento del niño. No obstante, a partir de los seis meses, empiezan a introducirse los primeros alimentos distintos a la leche.


• En la alimentación del bebé a partir de los seis meses, en general, se empieza con las frutas (en puré) o con las verduras más dulces y no demasiado ricas en fibra, como las zanahorias, las patatas y los calabacines, que, normalmente, suelen ser bien aceptados por el niño.

• Es mejor añadir a los primeros purés de verduras papillas de cereales sin gluten (arroz y maíz), para evitar el riesgo de falta de hierro.

• Cuando se empiezan a introducir, las papillas de frutas y los purés deben ser muy fluidos. La primera papilla puede consistir en una crema muy fina y diluida de zanahorias y patatas (hervidas o cocidas al vapor), condimentado con un poquito de aceite de oliva virgen.

• Las siguientes papillas pueden enriquecerse con otras verduras, como las judías verdes. Si no se manifiestan problemas de alergias, y al niño le gustan las verduras que se le ofrecen, se puede llegar a componer una pequeña menestra en el transcurso de unas 4 ó 5 semanas.

• La fruta se debe ofrecer finamente triturada. Para empezar, son aconsejables la manzana, la pera y el plátano. Algunas frutas estivales, como los melocotones y los albaricoques, también son una buena opción.

• Durante el primer mes de destete, es suficiente con dar al niño una papilla al día, y mantener la leche para el resto de las comidas. Además, el puré de una sola verdura no es muy nutritivo y es posible que, poco después de haberlo tomado, el pequeño pida leche: no hay ninguna razón para no dársela.

• Mejor evitar añadir sal a las papillas. Con el tiempo, el niño ya tendrá la oportunidad de irla probando. De lo contrario, podría manifestar, desde muy pequeño, una mayor inclinación a los alimentos salados.

Receta de crema de verduras

En la primera fase del destete, los purés para bebés deben ser cremosos y no demasiado densos. Después, ya podrás ir aumentando la consistencia, pero sin exagerar. Para empezar, he aquí una buena crema de verduras.

Ingredientes para dos raciones: 150 gramos de patata (se puede sustituir por calabaza), 150 gramos de zanahoria, 50 gramos de judías verdes y aceite de oliva virgen (dos cucharadas).

Elaboración:

• Vacía la calabaza y córtala a daditos. Quita la piel a las zanahorias y córtalas a rodajas. Elimina los hilos de las judías verdes y córtalas a trocitos.

• Introdúcelo todo en una cazuela y añade medio vaso de agua mineral.

• Cuécelo a fuego lento durante 30 minutos. Pasa todos los ingredientes por la batidora y añade aceite de oliva virgen crudo. Si el puré queda muy espeso, es mejor añadir algunas cucharadas de agua y volver a calentar durante algunos minutos más.

• Con el añadido de los nuevos cereales, la papilla se hace más sustanciosa y se enriquece con almidón y proteínas: es probable, precisamente por esta razón, que consiga satisfacer por entero el aporte nutritivo de la comida y que el niño ya no pida el complemento de leche.

Fuente: http://www.mibebeyyo.com/bebes/3-6-meses/destete-frutas-verduras-209

Masajes para bebés


El masaje del bebé
¿Qué es el masaje infantil?

El masaje infantil es un lenguaje no verbal, una forma que la mamá tiene a su disposición para transmitir afecto y ternura.

El niño experimenta, con el masaje, una sensación de bienestar no sólo física, sino también emocional.

La mamá utiliza para dar al niño, pero también para recibir, porque aprende a conocer a su hijo y a captar sus estados de ánimo.


¿Cuál es el momento ideal del día para hacer un masaje al niño?

¡Cuándo se quiera! El masaje en los niños más pequeños se puede hacer, por ejemplo, después del baño del bebé, al vestirlo, cuando se le cambia el pañal...

También puedes masajearle sobre la cama, antes y después de la tetada.

¿Cómo masajear al niño en caso de cólicos?

El problema de los cólicos de los bebés no se supera del todo con el masaje, pero sí que se puede ayudar al niño a que se sienta mejor.

Lo importante es hacer movimientos rotatorios sobre el abdomen, que vayan en el sentido de las agujas del reloj, y es mejor empezar desde arriba con la palma de la mano bien abierta.

Puedes extender al pequeño sobre una cama o sobre una superficie de apoyo, ponerlo boca arriba y con las manos debes flexionar las piernas hacia la parte interior (como las ranitas).


¿En qué posición debe estar el niño durante el masaje?

Es importante que, sin hacer movimientos innaturales o forzados, cambies las posiciones para darle el pecho, para hacerle mimos y para darle masajes al bebé: se beneficiará también el desarrollo de su simetría.

Si se deja a un niño pequeño siempre en las mismas posiciones, éste adquirirá, con el tiempo, hábitos posturales demasiado rígidos.

¿Y para los niños más movidos?

Lo ideal es hacerles adoptar la posición buda. Cuando el niño está agitado, es necesario cogerle en brazos, hacer que se siente cogiéndole las piernas y entrecruzándoselas, como si adoptase la posición tipo buda, y dejando la espalda apoyada sobre tu cuerpo y a él la posibilidad de mirar al mundo.


¿Cuánto debe durar un masaje?

Será el niño mismo quien se lo haga saber a la mamá cuando esté cansado, mostrándose un poco nervioso y molesto.


¿Es recomendable masajear la cara del bebé?

Es mejor no masajearle la cara. El niño, con muecas y sonrisas, desarrolla sus capacidades faciales.

Fuente: http://www.mibebeyyo.com/bebes/3-6-meses/masaje-bebe-consejos-experta-669

Regurgitación del bebé

Regurgitación. El bebé echa leche después de las tomas

La regurgitación se puede definir como un mecanismo de autorregulación mediante el cual el recién nacido expulsa el exceso de leche. En otras palabras, es la emisión de la leche que todavía no se ha digerido. Se reconoce porque todavía no tiene el típico aspecto, similar al requesón, que sí adquiere cuando ya se ha iniciado el proceso digestivo.


Se trata de un fenómeno fisiológico que no debe preocupar. Muy probablemente, se debe a un desarrollo incompleto del cardias, una pequeña válvula situada entre el esófago y el estómago que regula el paso de los alimentos. En el primer mes, lo sufren el 90 por ciento de los recién nacidos, mientras que el fenómeno tiende a disminuir alrededor de los tres o cuatro meses, hasta desaparecer por completo antes de cumplir el primer año. Respondemos a las preguntas más frecuentes de las mamás.

Mamitis

El niño tiene mamitis

Si tu hijo te sigue a todas partes, no te pierde de vista ni un segundo y quiere que le mimes y que le cojas en brazos a menudo, no lo dudes: tiene "mamitis".

Cuando el pequeño se encuentra en esta fase, que generalmente se manifiesta alrededor de los trece meses, encontrar un poco de tiempo para ti misma resulta casi imposible. No es extraño que, coincidiendo con esta fase, rechace la presencia de los abuelos o del canguro.

Este comportamiento contribuye a hacer nacer en ti sentimientos de culpa (totalmente injustificados), que te pueden hacer pensar que estás aplicando un método educativo inadecuado.

Mamitis: ¿Qué es?

La "mamitis" se debe a la ansiedad por la separación, y es una fase normal del desarrollo que va disminuyendo gradualmente, a medida que el niño crece. En este período, el pequeño desea estar siempre con su madre y siente angustia si ella se aleja: se siente inseguro, asustado, triste y a veces enfadado.

El llanto, los gritos y, en ocasiones, los caprichos son sus maneras de manifestar sus emociones, y su nivel de "mamitis" muestra su adaptabilidad a los cambios. Este comportamiento no aparece de golpe ni desaparece de un día para otro. Además, se manifiesta a causa de una suma de factores. Se atenúa cuando, con el paso del tiempo, estos elementos pierden importancia:

• Dependencia de la madre. A esta edad, la madre representa la seguridad en los momentos difíciles, cuando el pequeño está cansado o cuando experimenta una frustración (una caída o el descubrimiento de que un objeto está fuera de su alcance).

• Miedo a las novedades. Cuando tiene un año, la madre forma parte del ambiente que le rodea y, cuando ella no está, se siente perdido. Si no la ve en la cocina a la hora de comer, u otra persona le da de comer, por ejemplo, aflora su inseguridad.

• Falta de noción del tiempo. El niño no es capaz de percibir el paso del tiempo y, por lo tanto, no comprende que el alejamiento de su mamá es una situación momentánea.

Fuente: http://www.mibebeyyo.com/ninos/psicologia-infantil/mamitis-175

El primer día de guardería

El primer día de guardería

Es importante que la mamá (el papá, los abuelos, el canguro o cualquier figura de referencia del niño) esté presente durante los primeros días, que serán de transición.


La persona que se encargue de la “inserción” del niño en la guardería hará de intermediario entre el niño y el nuevo entorno, procurando sobre todo que el pequeño les coja confianza a los cuidadores de la guardería.

Cómo preparar el inicio de la guardería: las claves del éxito

● Los papás del niño deberán estar seguros y convencidos de la decisión, para transmitir tranquilidad, confianza y entusiasmo al pequeño. Esto favorecerá la adaptación del niño. El niño percibe y absorbe la ansiedad de sus padres.

● Si, antes de iniciar la guardería, el niño ya está acostumbrado a separarse de la madre será una gran ventaja. Y es que el miedo a la separación, al abandono es una de las principales dificultades para el niño.

Además, la separación de la madre es más fácil de asumir si se hace de un modo gradual. Por lo que este “entrenamiento” previo puede hacerse en mejores condiciones.

Durante el rato que la mamá esté ausente, es recomendable que el niño esté con algún familiar o alguna persona conocida con la que tenga trato y confianza, y se sienta a gusto.

Se puede empezar por ratos cortos y cada vez alargar más la separación, hasta que se conviertan en toda una tarde. Llegados a este punto, el niño estará preparado para “enfrentarse” a la guardería.

● La despedida puede ser uno de los peores momentos del primer día de guardería. Hay que evitar irse de “hurtadillas” cuando el niño está despistado, ya que el niño podría vivirlo como un abandono.

Es bueno proporcionar al niño unas palabras breves de despedida para consolarle, pero sin alargar el momento en exceso. Además, no hay que sucumbir a los llantos del niño y pataletas del niño, ni ofrecerle golosinas u otros “premios” para que se calme.

Fuente: http://www.mibebeyyo.com/bebes/cuidados/guarderia-primer-dia-726

Contagios y enfermedades en la guardería

Enfermedades en la guardería

El sistema inmunitario del pequeño se activa ante los estímulos de los agentes infecciosos (bacterias, virus…). Las defensas del niño se volverán más fuertes y agresivas si se produce un contacto sucesivo con el mismo agente patógeno, ya que el organismo activará su “memoria” inmunológica.


Por lo tanto, puede que el niño enferme más a menudo en la guardería o el colegio. Sin embargo, en compensación, durante esta etapa, se enfrentará mejor a los virus y a las bacterias.

Es necesario controlar que cada vez se trata de trastornos y enfermedades diferentes, y no de los mismos que se repiten. La recaída puede suponer una mala curación o unas defensas débiles o insuficientes.

Si el niño padece primero un resfriado y después una laringitis, los padres pueden estar tranquilos, porque significa que su sistema inmunitario funciona correctamente.

Las enfermedades a las que el niño estará más expuesto son el sarampión, la parotiditis, la rubéola y la varicela, que se contraen después de los tres años y de las cuales el niño ya está vacunado.

http://www.mibebeyyo.com/bebes/9-12-meses/guarderia-enfermedades-730

Hipo: aliviarlo en el bebé


El hipo se debe a una repentina contracción del diafragma, que empuja el aire en los pulmones causando el cierre de las cuerdas vocales y produciendo un ruido característico. En la mayoría de los casos, aparece sin un motivo preciso y, desde el punto médico, no reviste ningún significado particular.

Una indigestión o el hecho de tener el estómago demasiado lleno pueden causar la comprensión del diafragma y, como consecuencia, el hipo del bebé. Por el mismo motivo, el hipo se manifiesta, sobre todo, si se beben demasiadas bebidas gaseosas. Es frecuente, especialmente, en los primeros meses de vida del bebé, puesto que, en el lactante, el cardias, la válvula que comunica el esófago con el estómago, aún no se ha desarrollado por completo y, por lo tanto, no se cierra perfectamente. El hipo también puede aparecer después de una crisis de llanto, después de una regurgitación o cuando el niño come demasiado rápido: en todas estas situaciones, el niño traga mucho aire y esto es lo que provoca el hipo.

En el caso de que se trate de un lactante, para hacer cesar el hipo, se le pueden ofrecer algunas cucharadas de agua, ponerle al pecho durante algunos segundos o darle el biberón. Si el niño es más mayorcito, además de los remedios indicados para los lactantes, se pueden obtener resultados pellizcando fuertemente la punta del meñique del niño o bien se le puede ofrecer una cucharada de miel o de azúcar, repitiendo el intento tres veces, con intervalos de dos minutos entre uno y otro, si el primero no funcionase.

Lo que nunca hay que hacer para aliviar el hipo es tapar la nariz al niño para obligarle a retener la respiración: en muchos casos, sólo se obtiene que el niño llore desconsoladamente.


Cuándo dirigirse al pediatra

Se puede consultar al pediatra en los siguientes casos:

- Si el hipo dura más de tres horas: el tiempo necesario para que el estómago se vacíe.

- Si el niño está sufriendo: llora, está inquieto y tiene fiebre.

Fuente: http://www.mibebeyyo.com/ninos/enfermedades-nino/aliviar-hipo-bebe-1851

Cómo elegir la guardería

Elegir guardería

La elección de una guardería debe ser una decisión meditada, pero también una cuestión de confianza. La guardería elegida debe gustar a la mamá, para que ésta transmita seguridad al niño.

Frente a un amplio abanico de posibilidades, el dilema consiste en descubrir cuál es la mejor guardería antes de presentar la solicitud de inscripción.

Sin embargo, a menudo, el problema no es cuál guardería elegir, si no conseguir plaza en el jardín de infancia deseado por los padres.

En nuestro país, los requisitos que deben cumplir las guarderías están recogidos en la Ley de Orientación General del Sistema Educativo (LOGSE).

Asimismo, las comunidades autónomas poseen una normativa específica, que aumenta las garantías de seguridad e higiene de las instalaciones.

Dejando a la ley el deber de controlar los requisitos mínimos de cada centro, a las mamás les toca juzgar el clima afectivo, el estilo de las relaciones y las formas de acogida, entre otros. En resumen aquel "quid" que hará de una guardería "nuestra" guardería.

La respuesta no es siempre sencilla. Si bien es cierto que a menudo se prefiere, por comodidad, la guardería que está más cerca de casa, también se puede optar por una guardería cerca del trabajo o de los abuelos.

No obstante, hay que tener en cuenta muchos otros aspectos a la hora de elegir, como el espacio, las actividades, el personal o el horario.

Si todavía no has elegido guardería para tu hijo, esta guía con los criterios de elección puede serte muy útil. Si ya tienes guardería, comprueba si cumple con las recomendaciones de los especialistas.

En el momento de elegir la guardería, hay que tener en cuenta:

El personal

Los horarios

El espacio

La decoración, los materiales y los juegos

La acogida en los primeros días

Las actividades

La participación de los padres

El comedor

El jardín

Los recursos para niños especiales

No siempre es posible cumplir a rajatabla con todos los requisitos o las guarderías no satisfarán al 100% a los papás; estas recomendaciones no dejan de ser una guía.

Sin embargo cuantos más requisitos se cumplan, más cerca estaremos de la guardería “perfecta”.

Fuente: http://www.mibebeyyo.com/bebes/9-12-meses/guarderia-como-elegir-731

El rito de las despedidas

despedidas

Cuando os despedís del niño, es importante hacerle entender que alejarse no es una forma de libraros de él, sino que es una exigencia de la rutina diaria. Explicadle dónde vais, cuándo volveréis, cuánto os disgusta tener que dejarle e inundadle de mimos.

Para preparar su entrada en el colegio, inventad una cancioncilla que contenga su nombre y que, en caso necesario, pueda servirle de código secreto para imaginar que está de nuevo con sus padres y a salvo.

Una vez le hayáis tranquilizado, la separación debe ser firme y clara, sin vuelta atrás ni remordimientos. Prolongar más allá de lo razonable los ritos de la despedida no sirve para evitar las lágrimas. Es más, suele acentuarlas y convence al niño de que no estáis seguros de lo que hacéis.

Fuente: http://www.mibebeyyo.com/ninos/psicologia-infantil/rito-despedidas-4812

Fiebre

La fiebre en los niños. Tratamientos

Se considera fiebre la temperatura corporal interna (tomada por vía anal) superior a 37,5 ºC. Por el contrario, se habla de fiebre alta cuando la temperatura supera los 38,5ºC.

La fiebre es un síntoma muy común en los niños y lo importante es controlar si entre las 24 horas a partir de la manifestación del malestar, el niño muestra otros síntomas como diarrea, vómitos o tos.

En caso de fiebre, hay que actuar así:

• Administrarle un antitérmico, previamente prescrito por el pediatra.

• Bañarle en agua templada para favorecer la dispersión del calor.

• Dar de beber mucho agua al niño.

• Cuando la fiebre haya desaparecido, el niño necesita otros cuatro o cinco días de convalecencia, lo que significa que debe guardar reposo y sólo puede salir de paseo en las horas más cálidas de día.

• Los golpes de frío son muy peligrosos, ya que la gripe provoca una inmunodeficencia transitoria que priva al organismo de los mecanismos de defensa naturales.

• Evita que el niño entre en contacto con personas que estén resfriadas y no le lleves a lugares muy concurridos o poco aireados.


Alimentos útiles para la fiebre:

• Cuando el niño tiene fiebre, suele perder el apetito. Por este motivo, debes prepararle platos apetitosos y ligeros,y dar preferencia a los purés de verdura y a los alimentos "fluidos".

• Con la fiebre, el pequeño pierde una gran cantidad de líquidos, por lo que necesita beber mucho para hidratarse.

Fuente: http://www.mibebeyyo.com/ninos/enfermedades-nino/fiebre-1257

Cómo se produce la erupción de los dientes














Cada niño sigue su propio ritmo, debido a sus características constitucionales concretas. Los primeros dientes pueden permanecer ocultos bajo las encías durante semanas antes de "salir al descubierto", o bien pueden perforar el tejido gingival de forma repentina, sin ninguna señal de aviso.

Generalmente, el primer diente aparece antes del año, con mayor frecuencia alrededor de los seis meses. En cualquier caso, los tiempos son muy variables.
Cuando el diente está a punto de salir, la encía cambia de aspecto: se hincha y enrojece y, al tacto, presenta una protuberancia dura, de color blanquecino, la irritación es molesta y, algunas veces, dolorosa para el pequeño.

Es normal que el niño tenga menos apetito, que presente una salivación más abundante de lo normal (debida a la molesta sensación de picor causada por el estreñimiento de las encías) y que sienta la necesidad de morder, con el fin de aliviar su malestar.

Fuente: http://www.mibebeyyo.com/bebes/salud-bebe/erupcion-dientes-4292

Los primeros dientes del niño

Los primeros dientes del bebé

A algunos bebés, a los cuatro meses ya les ha salido el primer diente. Otros, en cambio, con un año, aún no tienen ninguno. La mayor o menor precocidad en la salida de los dientes es una característica individual, que varía de un niño a otro, y que muchas veces tiene un componente hereditario.

Contrariamente a lo que muchos papás piensan, el retraso en la aparición de los dientes no se debe a una carencia de calcio. De hecho, el niño ya obtiene la cantidad necesaria de este mineral mediante la ingesta de leche y de derivados lácteos, alimentos, en general, muy abundantes en la dieta de los primeros años de vida. Por esta razón, si la alimentación del niño es correcta, no sirve de nada administrar complementos de calcio, con el fin de estimular la erupción de los dientes. "Únicamente, en el caso de que a los catorce o quince meses aún no hubiese ningún síntoma de aviso de una próxima erupción dentaria, sería interesante hacer alguna investigación para descubrir si alguna cosa no funciona", ha explicado nuestro pediatra, Luis G. Trapote.

La salida de los dientes viene acompañada, normalmente, de ligeros trastornos para el niño, como fiebre y resfriado y, a veces, incluso, de diarrea e irritaciones. Un hecho que ha vuelto a demostrarse en un estudio reciente realizado en la Universidad La Sapienza de Roma, que ha ofrecido datos incuestionables sobre la relación que existe entre esta etapa del desarrollo del niño y una serie de pequeños trastornos.

Cuándo aparecen los primeros dientes del bebé:

En la mayoría de los niños, el orden de aparición de los dientes de leche se adapta a la evolución de su alimentación. Los primeros en salir son los incisivos, ideales para masticar verduras y alimentos blandos; más tarde, apuntan los molares y caninos, adaptados a la carne. He aquí el orden de aparición:

• 6-8 meses: incisivos centrales inferiores
• 7-10 meses: incisivos centrales superiores
• 8-10 meses: incisivos laterales superiores
• 10-14 meses: incisivos laterales inferiores
• 14-20 meses: molares más internos, superiores e inferiores
• 16-24 meses: caninos, inferiores y superiores
• 24-30 meses: molares externos, superiores e inferiores.

Fuente: http://www.mibebeyyo.com/bebes/6-9-meses/primeros-dientes-nino-167

lunes, 22 de noviembre de 2010

Sentarse

El sentarse por sí mismo le da a tu bebé una nueva perspectiva del mundo. Una vez que ha fortalecido los músculos de su cuello y brazos lo suficiente para mantenerse erguido y ha aprendido dónde colocar sus piernas para no tropezarse, es sólo cuestión de tiempo hasta que empiece a gatear, ponerse y caminar.

Cuándo comienza a sentarse




Cómo se prepara tu bebé para sentarse y truquitos para ayudarle.

Tu bebé probablemente empezará a sentarse por sí solo entre los 4 y 7 meses. Este es también el periodo en que aprenderá a darse la vuelta cuando está echado en el suelo y a mantener erguida la cabeza. A los 8 meses, aproximadamente, el 90 por ciento de los bebés puede sentarse bien sin apoyo durante varios minutos. (Incluso los bebés que dominan la posición de sentados acaban desplomándose, normalmente porque pierden interés en mantenerse erguidos).

Cómo se desarrolla

Es cierto que puedes poner y sujetar a tu bebé en posición sentada casi desde el primer día. Pero no se sentará de verdad y por sí mismo hasta que adquiera control de la cabeza. Hacia los 4 meses comienzan a fortalecerse rápidamente los músculos del cuello y la cabeza, y el bebé los empleará para elevarla y mantenerla erguida mientras está tumbado sobre su barriga.

Lo siguiente que hará es aprender a apoyarse en sus brazos y a separar el pecho del suelo, como una especie de miniflexión. A los 5 meses ya puede ser capaz de estar sentado un rato por sí solo, aunque es recomendable que tú estés cerca para ayudarlo; también es bueno que lo rodees con almohadas para amortiguar una posible caída.

Pronto tu bebé aprenderá a mantener el equilibrio mientras está sentado extendiendo hacia adelante uno o los dos bracitos y apoyándose en ellos. A los 7 meses, probablemente podrá sentarse sin apoyo (lo que liberará sus manos para explorar el entorno) y aprenderá a girarse para alcanzar los objetos mientras está sentado. Quizás en este momento sepa ya utilizar los brazos para impulsarse cuando está tumbado sobre su barriga y sentarse. A los 8 meses, lo más probable es que se siente perfectamente sin ningún apoyo.

Qué viene después

Te puedes imaginar qué ocurre después de que tu bebé aprenda a impulsarse hacia adelante desde la posición de sentado y a mantener el equilibrio sobre sus manos y rodillas. Puede aprender a moverse para adelante (o para atrás) a "cuatro patas" a partir de los 6 ó 7 meses, y a gatear a los 10. Con esta edad tu niño ya tiene mucha movilidad y mucha curiosidad, por lo que es muy importante que la casa esté a prueba de niños.

Muchos pediatras recomiendan esperar hasta que el bebé se pueda sentar sin demasiado apoyo para empezar a darle alimentos sólidos.

Tu papel

Elevar la cabeza y el pecho de tu bebé lo ayudan a fortalecer los músculos del cuello y a desarrollar el control necesario en la cabeza para estar sentado. Le puedes ayudar animándolo a que juegue boca abajo en el suelo y llamándolo para que mire hacia arriba. También puedes mostrarle un juguete sonoro o un espejo cuando está en esa posición para que levante la cabecita; estos objetos, además, sirven para comprobar que su oído y su vista están bien. Una vez que tu bebé se sienta cómodo y seguro estando sentado, coloca juguetes y otros objetos cerca de él, aunque fuera de su alcance, en los que pueda concentrar su atención mientras aprende a mantener el equilibrio con la ayuda de sus brazos.

Como siempre, y especialmente mientras aprende a sentarse, asegúrate de estar cerca de él por si se cae, o por si quiere mostrarte sus nuevas destrezas.

Cuándo preocuparse

Si ves que tu bebé no es capaz de mantener erguida la cabeza para los 6 meses y todavía no ha aprendido a mantenerse derecho apoyándose en sus brazos, habla de ello con su pediatra la próxima vez que lo visites. Los bebés se desarrollan a su propio ritmo, algunos más rápido que otros, pero el control de la cabeza es esencial para poder sentarse independientemente. Y sentarse es fundamental para aprender a gatear, a ponerse y a caminar. Ten en cuenta que los bebés prematuros pueden llegar a estas etapas de desarrollo o momentos claves del desarrollo meses más tarde que los nacidos a término.


Aquí puedes ver un vídeo de cómo se prepara tu bebé para sentarse

Fuente: http://www.babycenter.es/baby/hitos_del_desarrollo/sentarse/

Juguetes para bebés recién nacidos


Lo que más le gustará a tu bebé en los primeros meses, cuando aún no sabe coger objetos o sentarse, son las cosas que pueda ver y escuchar. Al principio, verá borroso y se fijará en objetos que estén aproximadamente a una distancia de 20 a 35 cm de sus ojos. El rostro humano le llamará la atención y podrá reconocer el tuyo al cumplir más o menos 1 mes de vida, pero también le gustarán las fotos o dibujos de rostros de tamaño más grande.

A esta edad le atraen los diseños con grandes contrastes y los colores chillones porque son los que mejor ve. Ya ha aprendido a apreciar los sonidos y la música suave. (Busca las letras de todas tus canciones de cuna favoritas.) Los objetos que se mueven lentamente y producen un sonido suave le resultan mucho más interesantes que los que están fijos y en silencio.

Juguetes de mano: Como tu bebé no ve muy bien de lejos, apreciará todo lo que le coloques en su línea visual. Aunque no podrá todavía sostener juguetes, mostrará sus preferencias queriendo tocar aquellos que le gustan.

Grabadora o cajita de música: La música es una de las mejores maneras de entretener y calmar a tu niño. Hazle oír varios tipos de música y fíjate cómo responde.

Móviles: Los móviles pueden agregar una nueva dimensión a la visión horizontal del mundo que tiene el bebé. Busca los que tengan grandes contrastes de colores y diseños. A muchos bebés les gustan especialmente los juguetes con música. Cuélgalos en la barandilla de la cuna. Los niños de esta edad miran hacia la derecha el 80 por ciento de las veces, de modo que un juguete puesto por encima de la cabeza o a la izquierda tendrá un valor limitado en este momento. Por seguridad, mantén el juguete fuera del alcance del bebé.

Espejo irrompible: Aunque en esta etapa no se dan cuenta de que están mirándose a sí mismos, a los bebés les encanta ver reflejada su imagen. Y a la edad de 3 meses, tal vez tu bebé ya haya entablado una relación con su propia imagen y haya empezado a sonreírle. Busca un espejo que puedas atar al lado de la cuna o colgar cerca de la superficie donde le cambias los pañales.

Libros blandos con grandes contrastes: Los libros blandos con diseños o decoraciones fáciles de ver están especialmente diseñados para bebés. Acuéstate a su lado para que pueda ver cómo pasas las hojas a medida que le lees en voz alta: vale la pena leerle incluso a esta edad.

Juguetes sensoriales: Los juguetes blandos que vibran o suenan al apretarlos divertirán a tu bebé durante muchos meses. Los sonidos también lo ayudarán a darse cuenta de qué es lo que está haciendo su mano.

Sonajeros en las muñecas y en los tobillos: Ata un sonajero blando a la muñeca o al tobillo de tu bebé, o ponle calcetines que tengan cascabeles cosidos para que se entretenga un buen rato mientras experimenta con los nuevos sonidos que él mismo es capaz de producir.

Campanillas de viento: Son esos tubitos de metal que cuelgas y suenan cuando los agita el viento. A los bebés les encanta la música suave, así que puedes colgarlas en algún lugar dónde pueda ver cómo se mueven y escuchar su sonido. Si las colocas arriba de la cuna, quizás tu bebé se acostumbre a mirarlas durante algunos minutos antes de quedarse dormido. También puedes levantar a tu bebé de vez en cuando para que él mismo pueda tocar las campanillas.

Fuente: http://www.babycenter.es/baby/jugar/juguetes_0_a_3_meses/

jueves, 26 de agosto de 2010

Manual para que papás y mamás aprendamos a jugar

Elaborado en colaboración con el equipo de expertos en juego y desarrollo infantil del Departamento de Pedagogía-Producto del Instituto Tecnológico del Juguete (AIJU), el Manual nace con el objetivo de recordar y estimular a los padres a jugar con sus hijos y participar con ellos en el juego como actividad indispensable para el desarrollo del cuerpo y de la personalidad de los más pequeños.

Fuente: http://juguettos.com/es/home/manual-papas-y-mamas-2



domingo, 22 de agosto de 2010

¿Congelas la leche materna?

Justificar a ambos lados



















Recomendaciones para la conservación de la leche materna:

Antes de manipular el pecho (para una extracción manual o con sacaleches):
*Lavarse bien las manos.
*Efectuar un masaje en el pecho.
*Usar recipientes que han sido lavados con agua jabonosa y enjuagados.
*Poner la fecha en los recipientes en el momento de la recogida.
*Refrigerar o congelar enseguida la leche.
*Usar leche fresca siempre que sea posible.
*Congelar la leche que no se vaya a usar antes de dos días

Conservación y almacenamiento de la leche:
Leche madura recién exprimida y guardada en un recipiente cerrado se mantiene a temperatura ambiente a 25º C o menos durante 8 horas y en el frigorífico a 4º C ó menos durante unos 5 días

Leche congelada, se conserva durante:
-2 semanas en el congelador incluido dentro del frigorífico (*/***).
-3 meses en el congelador de puerta separada del frigorífico
-6 a 12 meses en congeladores de tipo combi de 4 ****(– 20º C****)

Tipos de envase para almacenamiento de la leche:
Si se va a congelar la leche, utilizar envases de plástico duro o de vidrio, aunque a mí me gustan las bolsas de plástico que se venden en el Corte Inglés.

¿Cómo descongelar la leche materna?:
*Se recomienda siempre que sea posible, descongelar despacio en el refrigerador
*Si no es posible descongelar despacio en el refrigerador, se puede poner el recipiente con la leche congelada, debajo del grifo, empezando con el agua fría y se va poco a poco aumentando a tibia y a más caliente hasta alcanzar la temperatura adecuada
*No dejar hervir la leche.
*Agitar antes de probar la temperatura.
*No usar microondas para calentar la leche materna.

Aspecto de la leche descongelada:
La leche que ha sido congelada, al descongelarla se fracciona espontáneamente.

Y la leche desnatada que queda en el fondo del recipiente puede parecer bastante aguada; en el medio hay una capa de leche entera, y la nata queda en la superficie. Hay que agitar la leche antes de dársela al bebé.

Manipulación de la leche descongelada:
*La leche que ha sido descongelada dentro del frigorífico (pero no calentada ni usada antes) se conserva a temperatura ambiente 4 horas y en el frigorífico 24 horas.
*No volver a congelar leche que ha sido descongelada.
*La leche que ha sido descongelada bajo el grifo de agua tibia, sólo se conserva a temperatura ambiente mientras dura la toma.
*La leche descongelada bajo el grifo de agua tibia sólo se conserva en el frigorífico durante unas 4 horas.
*No volver a congelar la leche que ha sido descongelada.
*Desechar la leche que sobra de la toma.

Otras recomendaciones:
*Enfriar la leche en el refrigerador antes de añadir a un envase que ya tiene leche congelada.
*Se recomienda guardar la leche en pequeñas cantidades (60 – 80 ml.) para poder descongelar sólo lo que el niño o la niña vaya a tomar inmediatamente
Se puede mezclar para una misma toma leche extraída en distintos momentos siempre que no sobrepasen los 15 días de diferencia.

Fuente: Extraído del libro: La Lactancia Materna de Ruth Lawrence. Ediciones Mosby.

jueves, 19 de agosto de 2010

La hernia umbilical

La hernia umbilical consiste en la salida de parte del contenido del intestino por alguna parte más débil de la pared abdominal.

La zona del ombligo, bastante amplia antes de nacer para que pasen las venas y arterias procedentes de la placenta al cicatrizar los restos del cordón, se cierra.

Pero, en ocasiones, queda un pequeño “ojal” por el que pueden introducirse asas intestinales.

La hernia umbilical se produce por debilidad de la pared abdominal, porque los intestinos se interponen e impiden el cierre normal. En algunos casos, por desnutrición del bebé, se le debilitan los músculos.

¿Cómo se manifiesta?

Se notará el ombligo abultado. Puede alcanzar diferente tamaño.

A veces muy pequeño, pero solo evidente cuando el bebé llora o tose.

Otras está siempre fuera y puede ser como una naranja.

La hernia umbilical no suele dolor por sí misma.


¿Qué tenemos que hacer?

Muchas de las hernias umbilicales que se detectan en los primeros meses de vida desaparecen por sí solas.

Si el orificio de la hernia es pequeño (menor de 1 cm.) se puede poner un esparadrapo, que sujete los bordes, para que no se vuelvan a salir los intestinos y los músculos se puedan cerrar.

Conviene que lo consulten con el pediatra.

Si el bebé llora cuando tiene el esparadrapo, quítenselo.

En general se operan las hernias umbilicales de mayor tamaño, o las que están por encima del ombligo ( “ad-umbilicales”)


¿Se puede complicar?

No es habitual. Si la hernia se adentra a menudo, habrá que recurrir al cirujano.

Es raro que las hernias umbilicales se estrangulen.

Fuente: http://www.elbebe.com/index.php/es/salud/enfermedades-bebes/la-hernia-umbilical

Primera visita al pediatra - Revisión de los 15 días














En esta visita, que se realiza cuando el bebé tiene 15 días de vida, el médico inicia su historia clínica, le hace una exploración física completa y resuelve todas tus dudas.

El recién nacido y su mamá pueden volver a casa a los 2 o 3 días del parto, si no ha habido complicaciones, y a los 5 días si el nacimiento se ha producido por cesárea. En cualquier caso, entre los 5 y los 10 días de vida del bebé, la enfermera tiene que realizar la segunda prueba del talón.

PRESENTACIÓN A LOS 15 DÍAS

En algunos centros de salud el pediatra está presente durante la realización de esta prueba, pero lo más probable es que tu bebé no conozca a su médico hasta que tenga 15 días de vida.

Es importante que esta visita, que será larga e intensa, se desarrolle en una atmósfera agradable y relajada. Es muy útil que lleves una lista de dudas y preguntas y que permanezcas cerca del bebé para tranquilizarle. Esta visita tiene dos objetivos fundamentales:

Historia clínica. El pediatra recoge los datos sobre el embarazo, el parto y las pruebas perinatales realizadas en el hospital. También te preguntará sobre los antecedentes familiares y sobre tu estado de salud y el de tu pareja. Es muy útil que lleves los informes de alta hospitalaria y del tocólogo y los análisis realizados durante el embarazo.
Exploración física. Después de abrir la historia clínica, el pediatra realizará una exploración completa a tu bebé. Se inicia con la auscultación y la palpación del abdomen y finaliza con el examen de las caderas (un 1% de los bebés padecen luxación de las caderas) y de la boca, ya que éstas son las dos pruebas que más molestias ocasionan al niño.

El pediatra también examinará la textura y el color de la piel y el tamaño de los genitales, palpará su cabecita para comprobar el estado de las fontanelas y explorará las pupilas y el fondo del ojo.

El examen continúa con la exploración neurológica y la comprobación de sus reflejos, aunque las reacciones del bebé a las pruebas más molestas ya permiten valorar su respuesta a los estímulos.

Por último, la medición del peso, de la talla y del perímetro craneal permiten comprobar que el bebé crece a un ritmo sano.

CONSEJOS PARA CUIDARLE

En esta primera visita, el pediatra te explicará todo lo que debes saber para cuidarle bien. Te aconsejará sobre la dieta y los hábitos de sueño y te indicará cómo vestirle y bañarle, si puedes sacarle de paseo, cuál es la temperatura que debe tener su habitación, cómo protegerle del sol…

Además, te dará pautas para prevenir la muerte súbita y consejos para actuar en caso de accidentes. Por último te citarán para la siguiente visita, que será a los 15 días, cuando el bebé tenga un mes de vida.

Aprovecha para preguntar al pediatra y a la enfermera cualquier duda que tengas sobre el cuidado de tu hijo. Así te sentirás mucho más tranquila y segura cuando estés en casa sola con el bebé.

¡QUÉ CURIOSO!

El pediatra también comprueba los reflejos del bebé:

• De marcha. Se sujeta al bebé de pie sobre la camilla y el niño mueve una pierna y después la otra, como si fuera a caminar.
• De Moro. El médico deja caer la cabeza del bebé hacia atrás. El niño tiene que abrir los brazos y las manos.
• De presión palmar. Se acerca un dedo a su mano y el bebé lo agarra.

Fuente: http://pequebebes.com/visitar-al-pediatra-la-primera-vez/

4 ventajas de nacer en verano

Numerosos estudios han demostrado las ventajas de nacer en la época estival.
No hay mal que por bien no venga. Aunque el calor se te esté haciendo muy cuesta arriba tanto si estás en la recta final del embarazo (te encuentras incómoda, te cuesta dormir por la noche, te dan sofocones…) como si tu hijo acaba de nacer, para tu peque, llegar al mundo en esta época del año, va a ser realmente beneficioso. Por muchos motivos:


VA A SER MÁS ALTO Y MÁS FUERTE

En un estudio llevado a cabo durante más de 18 años en la Universidad británica de Bristol han descubierto que los bebés nacidos en verano e incluso a principios de otoño eran más altos y tenían una mayor densidad ósea que los nacidos en invierno o primavera. Al parecer, la exposición de la madre a la luz solar en los meses de calor potencia sus niveles de vitamina D, que absorbe mejor y que pasan hasta el feto.

VA A TENER UN CARÁCTER MÁS OPTIMISTA

Tras preguntar a más de 40.000 adultos si se consideraban afortunados o no y compararlo con los meses en los que habían nacido, el profesor Richard Wiseman, psicólogo de la Universidad de Hertfordshire (Inglaterra), ha encontrado que los nacidos en verano eran los que definitivamente tenían estrella. Según Wiseman se debe a la actitud más positiva ante la vida que estos niños desarrollan gracias a la mayor interactuación que se produce entre padres e hijos durante los meses de buen tiempo: salen a pasear, se van de vacaciones, se bañan juntos en el mar, hacen excursiones…

VA A SER MUY EMPRENDEDOR

En la Universidad Sueca de Umea aseguran que estos bebés también suelen tener más éxito profesional en su vida adulta, porque tienen una actitud más aventurera que los bebés nacidos en invierno. Tal vez porque al hacer buen tiempo les sacamos más de paseo y esta actividad estimula sus sentidos y su interés por descubrir el mundo desde sus primeros meses.

SE PONDRÁ MALITO MENOS VECES

Por una parte tendrá menos riesgo de padecer ictericia del recién nacido y si la tiene, de recuperarse de manera natural con la exposición a la luz solar. Además, los bebés nacidos en estos meses sufren menos afecciones respiratorias, lo que le ayudará a fortalecer su todavía inmaduro sistema inmunológico.

Fuente: http://www.crecerfeliz.es/El-bebe/Primer-mes

Lactancia


CONSERVACIÓN DE LA LECHE MATERNA
En algunas ocasiones puede ser útil extraer la leche para que alguien alimente al bebé cuando la madre no pueda hacerlo o bien para aliviar las molestias producidas por un exceso de leche en períodos en los que el apetito del bebé disminuye. La extracción de la leche puede hacerse de forma manual o de manera mecánica, mediante un "sacaleches", y recogerse de forma higiénica en recipientes especiales destinados a tal fin, cerrados de forma hermética para evitar su posterior contaminación. Según la Asociación Española de Pediatría, la leche materna puede conservarse en el frigorífico alrededor de cinco días y congelada entre tres y seis meses, en función de la temperatura. Es recomendable guardarlos en cantidades pequeñas (una toma) para evitar reutilizarla y etiquetarlos de forma correcta, descongelar en el frigorífico y, una vez descongelada, no volver nunca a congelar.

ALIMENTACIÓN DURANTE LA LACTANCIA
Aunque no se trata de contaminantes, es recomendable evitar ciertos alimentos de gusto fuerte ya que trasfieren a la leche materna sustancias que pueden alterar su sabor y provocar rechazo: verduras de la familia de las coles, ajo, cebolla, espárragos y especias. Es importante no tomar por cuenta propia ningún suplemento vitamínico que no haya recomendado el médico, y seguir todas sus indicaciones en cuanto a ingestión de fármacos.

Fuente: http://www.consumer.es/seguridad-alimentaria/ciencia-y-tecnologia/2010/08/12/194462.php

jueves, 5 de agosto de 2010

¿Cuánto tiempo tarda en volver la regla después del parto?

¿Acabas de dar a luz y quieres saber cuándo te volverá la regla? La primera regla después del parto indica que el aparato reproductor ha vuelto a la normalidad. Sin embrago, los ovarios todavía no funcionan perfectamente. Tienen que pasar algunos meses para que el ciclo recupere sus características habituales. Por este motivo, es normal que las primerras menstruaciones después del parto sean irregulares, así como que el flujo sea diferente al habitual.

Alrededor del 40 por ciento de las mamás que recurren a la lactancia artificial y las que dan el pecho al bebé durante menos de un mes tienen la primera menstruación unas ocho o diez semanas después del parto. A los tres meses de dar a luz, el porcentaje asciende al 70 por ciento, mientras que, a los seis meses, llega al 100 por cien.

En cambio, las mamás que dan el pecho de forma exclusiva tardan más tiempo en reactivar el ciclo. El organismo produce prolactina, una hormona que garantiza la lactación continua, pero que, al mismo tiempo, bloquea el ciclo durante más tiempo.

Según las estadísticas, el 35 por ciento de las mamás que optan por la lactancia materna tienen la menstruación unos tres meses después del nacimiento del bebé, mientras que el 65 por ciento reanuda el ciclo a los seis meses. Algunas mujeres pueden incluso tener su primera menstruación al cabo de 18 meses. Esta variabilidad depende del número de tomas, pero también del apetito del pequeño.

Si el bebé mama muy a menudo y durante mucho tiempo, la prolactina permanece constantemente elevada en el organismo materno, y el ciclo tarda un poco más de tiempo en reactivarse.

Fuente: http://www.mibebeyyo.com/parto/despues-del-parto/regla-parto-4149

martes, 20 de julio de 2010

La trona más adecuada para el bebé

Ha llegado el momento de pasar de los brazos de mamá y papá a la trona, donde el niño puede comer solito y conquistar su autonomía. Los criterios debemos tener en cuenta a la hora de elegir la trona para el bebé.

La trona del bebé es un producto indispensable durante los primeros años del pequeño. Lo mejor sería tener dos: una en casa y otra, más ligera y manejable, para llevar en el coche, cuando se va a un restaurante, a casa de los abuelos o se hace una salida de fin de semana. La trona puede comenzar a utilizarse a partir del momento en el que el niño cumple seis meses, es decir, cuando ya es capaz de mantenerse sentado por sí solo. De esta manera, se le ofrece una posición cómoda para tomar la papilla, jugar o disfrutar de unos momentos de descanso.
Si está regulada a la medida justa, la madre podrá dar cómodamente la comida al niño, permaneciendo sentada y sin verse obligada a efectuar movimientos forzados. En el caso de que la tenga, la bandeja de la trona será la mesa personal del pequeño y, una vez que se haya limpiado, le servirá también de superficie de apoyo para sus juguetes.
Cuando ya sea más mayorcito, quitando la bandeja, el niño podrá comer en la mesa con los mayores, permaneciendo sentado en su trona completamente seguro. Esto supondrá para él una nueva conquista y un fuerte estímulo de cara a su socialización. Y, también, será un motivo de orgullo para los padres, quienes le perdonarán sus múltiples “desastres” con la comida.

De qué material debe estar hecha la trona del bebé:

En el momento de comprar una trona, además de comprobar que sea práctica y funcional, también deben tomarse en consideración otros factores. Según el material en el que han sido fabricadas, la elección puede recaer en tres tipos de trona distintos:

Tronas mixtas
• Tronas cuya estructura es de plástico (se suele emplear el polipropileno) y el nailon se utiliza para las junturas que están sometidas a determinados esfuerzos.
• Tronas cuya estructura es de metal (tubos de acero), que ofrecen óptimas garantías en lo relativo a la solidez y la higiene, y cuyas junturas están cubiertas por materiales de plástico.

Tronas de plástico
También hay tronas que son completamente de plástico, y que resultan muy sólidas, higiénicas y bastante ligeras.

Tronas de madera
Las tronas de madera combinan perfectamente con cualquier tipo de decoración y ambiente, y duran mucho tiempo. Las partes acolchadas suelen estar forradas con PVC, que es un material lavable y atóxico, o con algodón, un tejido natural que favorece la transpiración.

Características básicas de las tronas para el bebé

• Plegables o fijas. Las tronas fijas son una óptima solución si se dispone de espacio. Otras tronas se pueden plegar, ocupando, así, un espacio más reducido. Estas últimas se pueden guardar en cualquier rincón de la casa y transportar cómodamente en el coche.
• Regulables. Muchos modelos disponen de un asiento regulable en altura, lo cual permite adaptarla a las necesidades del momento y poderla utilizar como una silla.
• Con respaldo reclinable. Permite al niño adoptar una posición más cómoda, para que pueda descansar un ratito. Sin embargo, la trona no puede sustituir a la cunita, donde hay que acostar al niño si se duerme de verdad. Aunque sea cierto que, en la actualidad, las tronas son prácticas y cómodas, de cara a un correcto desarrollo del pequeño, los pediatras aconsejan no dejarle durante más de media hora seguida en una posición que limite sus movimientos, pues, para desarrollarse, necesita ejercitar con plena libertad todas las partes de su cuerpo.
• Con asiento amplio y cómodo. Los modelos más recientes, además de tener en cuenta el crecimiento del niño, ofrecen unos asientos amplios y cómodos, apropiados hasta el momento en el que el niño cumple tres o cuatro años de edad. También presentan diversos accesorios, como, por ejemplo, una sillita reductora, destinada a que los más pequeños puedan sentarse como es debido, y que puede quitarse cuando el niño crezca.
• Transformables y evolutivas. En el mercado, también hay tronas pensadas para tener una utilidad cuando el niño crezca. Pueden transformarse, por ejemplo, en cómodas butaquitas, que el niño podrá utilizar durante mucho tiempo en su habitación, o en un práctico conjunto de mesa y silla. Otros modelos, como algunas tronas de madera, pueden regularse en altura, por lo que van creciendo con el niño hasta convertirse en sillas para adultos.
• Asimismo, algunas tronas también disponen de una bandeja que puede quitarse y regularse en distintas posiciones, tanto para que los papás puedan sentar o sacar más fácilmente al niño de la trona, como para adaptarse al crecimiento del pequeño. Otras, en cambio, no llevan bandeja, pues están pensadas para que el pequeño pueda sentarse a comer en la mesa con sus papás.

Fuente: http://www.mibebeyyo.com/bebes/compras-bebes-ninos/tronas-bebe-3819

Tronas asiento y tronas de mesa

Este tipo de tronas resulta ideal cuando los papás salen a comer fuera de casa con el niño. Se trata de tronas muy ligeras, de reducido tamaño y, en su mayoría, plegables.

Es importante comprobar que la estructura de la trona de mesa a la que debe fijarse (mesa o silla) sea estable y sólida. En el caso de las tronas de mesa, también se debe controlar que el sistema de anclaje de la trona tenga elementos que se puedan atornillar, y que disponga de seguro de cierre, con el fin de evitar posibles accidentes. Las tronas asiento, que se fijan a la silla, resultan más adecuadas para los niños más mayorcitos.

Lo que hay que comprobar antes de comprar la trona

- Los materiales deben ser sólidos y atóxicos, información que debe controlarse en el embalaje o las instrucciones.

- Debe tener los cantos redondeados para evitar que el niño pueda hacerse daño.

- La trona debe tener dispositivos dobles de seguridad, para evitar el riesgo de que se cierre accidentalmente.

- El asiento ha de ser amplio y cómodo, para poder contener al niño correctamente sentado y bien apoyado en su respaldo.

- Para comprobar la estabilidad de la trona, hay que apoyarse con fuerza en uno de sus brazos, con el fin de evaluar las oscilaciones. También hay que inclinarla 20-25 centímetros hacia atrás, y después soltarla para ver si recupera la posición correcta o, por el contrario, se vuelca. Hay que hacer lo mismo
inclinándola hacia delante.

- El respaldo debe ser anatómico y bien acolchado. Algunos pueden reclinarse en varias posiciones, para mayor comodidad del niño.

- Los cinturones deben estar sólidamente fijados y han de resistir los tirones. Además, deben poderse abrochar y desabrochar fácilmente, y no deben presentar bordes o hebillas con los que el niño pueda hacerse daño.

- La apertura y el cierre deben ser fáciles, como también deben serlo las demás funciones con que la trona pueda contar: la regulación a distintas alturas o la extracción de la bandeja resultan más cómodas si únicamente se requiere el empleo de una sola mano.

- Las ruedas permiten desplazar la trona con facilidad, pero hay que comprobar que, al menos dos de ellas, tengan frenos.

Seguridad de la trona:

- Si la trona elegida carece de ruedas, puede presentar otro riesgo, porque el niño podría hacer palanca apoyando los pies en una mesa o en un armario
y volcarla. Para evitarlo, la trona debe estar provista de dispositivos antivuelco.
- Para garantizar su seguridad, todas las tronas deben disponer de arneses (de cinco o tres puntos de anclaje), que aseguran al niño sin impedirle los movimientos. Están dotados de un separador para las piernas que, cuando el niño crezca, se podrá eliminar.
- Los modelos actuales casi siempre pueden regularse empleando una sola mano, pero deben estar provistos de un doble sistema de seguridad. Al adquirir una trona, es muy importante cerciorarse de que su manejo? (apertura y cierre, regulación de la altura del asiento y desplazamiento de la bandeja) sea fácil, pero que disponga de bloqueos de seguridad, para evitar desagradables accidentes.
- Todos los cantos deben ser redondeados y no tener partes empotradas donde el niño pueda pillarse las manos.
- Comprueba que la trona cumpla la nueva normativa europea EN 14988:2006 (vigente a partir de mayo de 2007).

Fuente: http://www.mibebeyyo.com/bebes/compras-bebes-ninos/tronas-mesa-3822

Retención de líquidos y piernas hinchadas

Las piernas hinchadas y la retención de líquidos son trastornos característicos del embarazo, debidos al estancamiento de líquidos en las extremidades inferiores y al peso de la barriga.

La retención de líquidos es muy típica en el embarazo, y se agudiza, sobre todo, en verano, con las altas temperaturas. El peso de la barriga comprime los vasos sanguíneos de la pelvis y obstaculiza la circulación en las piernas.

Remedios clásicos para la hinchazón en las piernas y los tobillos:

- Para prevenir la hinchazón, es necesario que la futura mamá se mantenga activa, caminando y nadando.

- Llevar unas medias de compresión graduada durante el día y descansar con las piernas elevadas ayuda a aliviar el trastorno.

- Atención: la manifestación repentina de hinchazón en las extremidades o un notable aumento del trastorno son síntomas que deben comentarse al médico, ya que son característicos de la preeclampsia, un síndrome potencialmente peligroso para la madre y para el bebé, que se manifiesta a través de hipertensión y de mal funcionamiento de los riñones. La preeclampsia requiere reposo absoluto de la embarazada y, en los casos más serios, la administración de fármacos para bajar la presión sanguínea.

- Las condiciones de la futura mamá y del feto pueden hacer incluso necesario el adelanto del parto, o bien la práctica de una cesárea.

Remedios "suaves" para aliviar la hinchazón en las piernas y los tobillos:

- El consumo de arándanos o de extractos de arándano favorece la circulación sanguínea y está especialmente indicado en caso de hinchazón de los tobillos, calambres y hormigueo en las piernas.

Fuente: http://www.mibebeyyo.com/embarazo/complicaciones/retencion-liquidos-piernas-3990

La prohibición del bisfenol

El bisfenol A utilizado para fabricar envases alimentarios vuelve a ser motivo de nuevos análisis destinados a valorar su seguridad.

El bisfenol A (BPA) es un producto químico que se usa para fabricar plásticos y revestimientos. Las principales sustancias de las que está compuesto son el policarbonato y las resinas epoxi para la elaboración de biberones, botellas de agua, dvd, pinturas y envases de alimentos y bebidas, entre otros. Su seguridad, discutida desde hace años, vuelve a ocupar a organizaciones, expertos y asociaciones dedicadas a la seguridad alimentaria, después de que un nuevo estudio llevado a cabo por distintas organizaciones científicas de todo el mundo ponga en entredicho su inocuidad. Los expertos han elaborado una carta destinada a la Agencia Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) para que se tomen medidas en torno al uso de esta sustancia química, con el argumento de que puede causar diversos problemas de salud.

Fuente: http://www.consumer.es/seguridad-alimentaria/ciencia-y-tecnologia/2010/07/12/194237.php